jueves, 23 de mayo de 2013

Mamushkas en la 5° Avenida

Y sí, Nueva York da para todo. Es hermosa y terrible. Está llena de paradojas. Un pibe juntando latas bajo los carteles de Broadway por ejemplo. El norte pobre de Manhattan (pobre pobre), y al sur Wall Street. Ellos son y lo saben, el ombligo del mundo. La verdadera capital del imperio. Y lo digo con respeto, porque tampoco es algo que se lo buscaron. Menos los que viven ahora. La mayoría es buena gente, solidaria, por lo menos conmigo. Pero hablemos de la ciudad. Es enorme, está llena de rascacielos pero también de grandes parques, solo el zoológico del Brown tiene 108 hectáreas (lo recomiendo, para los que nunca vieron un gorila vayan, eso sí hay que pagar para todo). Conviven en Nueva York el capital y la fe: templos para todos los gustos, y el gran templo de la bolsa. Qué sé yo, uno la tiene incorporada como la coca-cola, digo. Quien no conoce el puente de Brooklyn, por ejemplo? O Central Park, o el Rockefeller Center, por decir algunos lugares? Hoy por hoy la mayoría habla español o buena parte de la población, es que son en su mayoría Latinoamericanos, y cada vez son más. Legales o ilegales ahí están pariendo hijos, y pagando impuestos, obviamente. Otro día hablaré de mis afectos…

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